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Foto del escritorFernanda de la Torre V

Vacaciones

Una disculpa a todos pero me encuentro de vacaciones por lo que no habrá publicación el día de hoy.



Sin embargo, les dejó una reflexión de hace algunos ayeres que me gusta mucho.


“¿En dónde estabas hace doce años?….”

Intro: “¿Te imaginaste hace doce años que estarías dónde estas hoy?” – Anuncio de un whiskey en un espectacular en el Viaducto



A pesar de que hayan muchos años nuevos, que más de la mitad del mundo festeja su año nuevo en otra fecha y que al final del día, el 1º de enero es sólo una fecha más en el calendario, me gusta. Me gusta que sea un tiempo para cerrar círculos, para reflexionar; ajustar la brújula y marcar de nuevo el rumbo; para corregir errores y ver aciertos; para emprender los proyectos con renovado entusiasmo y para pensar en nuestros sueños y deseos.


Hace unas semanas, mientras conducía por el viaducto vi un anuncio de cierto whiskey (que de verdad no es por no darle crédito a su publicidad, nada mas no me acuerdo de cuál era) que casi me hizo chocar. El espectacular decía algo así como: ¿Te imaginaste hace doce años que estarías dónde estas hoy? Empecé a sacar cuentas de cuántos años tenía y en qué andaba en ese momento de mi vida. No. Definitivamente no me hubiera podido imaginar que estaría hoy en dónde estoy. ¡Ni soñando! Recordé a las personas que eran mis amigos entonces, la forma en que me veía, cómo me vestía.


Me puse a pensar en ese momento en todas las cosas que habían pasado desde que añejaron esa botella, hasta el día de hoy en mi vida. Al igual que el tiempo efectúa grandes cambios para el proceso de añejamiento de la bebida, el también nos transforma y, a veces, nos lleva también por caminos insospechados. Si hace doce años me hubieran dicho que estaría hoy escribiendo esta columna, me hubiera reído a carcajadas. De entrada por que en ese entonces no había descubierto mi pasión por comunicar. Hoy, ésta columna define en gran parte mi existencia. Empecé a revisar las decisiones y situaciones que me llevaron hasta aquí. Después de un recuento, debo reconocer que en esos doce años ha habido de todo, algunos muy malos momentos pero el balance es, por mucho, muy positivo.

El tiempo no pasa sin enseñarnos algo. Esas lecciones de vida que son invaluables. Mientras avanzaba hacia mi casa, comencé a hacer un rápido recuento de los daños de los últimos doce años. Empecé por relaciones, luego por el trabajo y después por mí misma. Pude ver muchos eventos desde otra perspectiva. Lo que en su momento viví como una gran tragedia acabó siendo una gran bendición y una gran lección.

Me gustó lo de la reflexión de los doce años, ya que es un periodo de tiempo suficientemente largo para hacer muchas cosas (Estudiar primaria y secundaria, por ejemplo) pero tampoco es tan largo que te haga perder la perspectiva.

Yo por lo general reviso únicamente el día 31 de diciembre lo que ha sido el año y me fijo metas para el próximo. Algunas se cumplen y otras quedan en la lista, si son relevantes, estarán en la lista del año siguiente. Lo de los doce años me gustó como ejercicio, nunca lo había hecho y me sorprendieron los resultados. Tal vez es un buen momento para trazar un rumbo general.


Ahora que el calendario nos obliga a cerrar un círculo, es un buen momento para preguntarnos: ¿Te imaginaste estar dónde estas hoy? Y ahora, ¿qué sigue? ¿A dónde quiero estar dentro de doce años? Y lo más importante ¿Cómo le voy a hacer para estar en dónde quiero? Si bien es cierto que el futuro es incierto, creo que nuestras acciones y decisiones tienen mucho que ver para determinar nuestro futuro. Como dijo Victor Hugo: “El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad”.

Muchas de las cosas que hace doce años creía que quería ahora no son ni remotamente importantes y otras que nunca había considerado, ahora lo son. Seguramente lo mismo sucederá dentro de doce años pero veo una diferencia: hace doce años no me paré a preguntar a dónde quería ir, ahora sí.


Quiero aprovechar este espacio para desearle a usted, que se toma el tiempo de leer estas líneas, por haberme acompañado en este año y que el 2019 esté lleno de sueños dicha, aprendizaje, éxito, amor, abundancia y salud.


Y tú ¿Dónde quieres estar en doce años? Me gustaría oír tu opinión en @FernandaT o en info@neteandoconfernanda.com

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