Pocos saben más de las palabras que quienes se dedican a estudiarlas. Las palabras tienen fuerza que va mucho más allá de las letras que las componen. Cada año, las principales casas editoriales de diccionarios, como Oxford, Merriam-Webster, Macquarie y la RAE eligen una palabra que será la que refleja las preocupaciones, el humor y el carácter distintivo del año.
Para la Fundación del Español Urgente (FundéuRAE) la palabra que resultó ganadora en 2023 fue “polarización”. Otras finalistas fueron: Amnistía, fentanilo, guerra y humanitario. Para seleccionar la palabra del año, se tienen en cuenta la presencia en los medios de comunicación, el debate social que se genera en el mundo hispanohablante; y el interés desde el punto de vista lingüístico. Basado en esos criterios, la palabra polarización resultó la ganadora por su gran presencia en medios y el cambio que ha tenido a través del tiempo.
La RAE define a polarización como la acción y efecto de polarizar o polarizarse. Si bien la palabra polarizar tiene varias acepciones, “orientar en dos direcciones contrapuestas” es la que predomina en medios de comunicación.
De acuerdo con FundéuRAE: Durante los últimos meses, esta palabra ha tenido una presencia “elevada” en los medios, siendo aplicada en diversos ámbitos como: la política, el ideológico, mundo deportivo, así como al debate en las plataformas digitales y en general, a “cualquier escenario en el que sea habitual el desacuerdo”.
La polarización no es lo mismo que un desacuerdo sobre cómo resolver un problema o tal o cual situación, lo cual es sano y natural en una democracia. La polarización es mas profunda que tener una opinión diferente a la otra persona sobre determinados temas. La polarización se produce cuando nos negamos a escuchar a otros o dejamos de ver a personas que no comparten nuestras ideas.
Entiendo porque la palabra polarización resultó ganadora. Cualquier discusión en las redes sociales, ya sea que se hable de amnistía, guerra, FANI (fenómenos aéreos no identificados, otra de las nominadas) o prácticamente cualquier tema está sujeto a la polarización. El problema de la polarización que el centrarnos únicamente en un polo, del argumento, es prácticamente imposible ser objetivos, justo en los tiempos en más necesitamos serlo. En vez de tender puentes, construimos muros. Cualquier tema esta politizado y polarizado. La opinión pública se divide en dos extremos opuestos. Todo está en términos de blanco o negro. ¿Cómo se puede discutir si nos negamos a escuchar el punto de vista opuesto? Para avanzar necesitamos llegar a acuerdos, escuchar a otros y privilegiar las buenas ideas de donde vengan. ¿Podremos hacerlo en el 2024 bajo la polarización que domina el panorama?
Buen domingo a todos. De corazón deseo que la palabra que defina el 2024, sea paz.
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